El pasado día 10 de julio de 2016, Cristiano Ronaldo, se tuvo que retirar lesionado en el minuto 24 de la final de la Eurocopa, tras una entrada de Dimitri Payet sobre la rodilla izquierda que dejó al portugués muy tocado y, pese a que intentó continuar unos minutos más, el fuerte dolor que sentía le obligó a retirarse del terreno de juego.
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¿Qué es el ligamento colateral medial o lateral interno?
El ligamento colateral medial (LCM) o ligamento lateral interno (LLI), es una banda de tejido fibroso ancho y espeso que transcurre a lo largo de la parte interior de la rodilla del fémur a la tibia. Mide unos cuatro-seis centímetros. La función principal del LCM es impedir que la pierna se doble demasiado hacia el interior, aducción, además ayuda a mantener la rodilla estable y permite la rotación.
Causas de la lesión del ligamento lateral interno de la rodilla
Generalmente, la rotura del colateral medial se produce durante las actividades que provocan y estiran excesivamente el ligamento. Eso se produce de repente a causa de un traumatismo, pero también puede deberse a causa de esfuerzos repetidos. El mecanismo usual es:
Un movimiento de torsión de la rodilla mientras el peso corpóreo es apoyado en el pie que queda fijo al suelo, sobre todo cuando se aterriza de un salto.
Puede ocurrir a causa de un trauma directo sobre la parte externa de la rodilla, obligando la rodilla a doblarse en la dirección opuesta, en valgo. Raramente una lesión LCM puede desarrollarse como con el tiempo a causa de actividades repetitivas como la rana en la natación.
Cuando estos movimientos o una combinación de ellos, son excesivos, más allá de la capacidad de aguante del ligamento, puede provocar una lesión del ligamento. Se ve principalmente en los deportes de contacto o los que solicitan rápidos cambios de dirección. Los deportistas que más frecuentemente padecen este accidente son: futbolistas, tenistas, jugadores de baloncesto, y esquiadores alpinos.
Síntomas de la lesión del ligamento lateral interno de la rodilla
El síntoma más común es dolor sobre el ligamento, es decir en la parte interior de la rodilla. Puede aparecer mucha hinchazón a nivel del ligamento lesionado. En los 2 días siguientes a la lesión se pude notar un hematoma, la rodilla hinchada y el sujeto cojea. En las lesiones más graves, los pacientes refieren que la rodilla se siente inestable. Los síntomas son proporcionales al grado de lesión.
Las lesiones de lo colateral mediales generalmente se clasifican en 3 grados:
Grado I – Esguince o lesión incompleta del LCM. El ligamento todavía es continuo y generalmente los síntomas son mínimos. Los pacientes lamentan dolor a la presión sobre el ligamento y pueden ser capaces de volver rápidamente a su deporte. La mayor parte de los deportistas pierden 1-2 semanas de juego.
Grado II – También lesión incompleta, pero el paciente refiere inestabilidad cuando intenta girar o levantarse. El dolor y la hinchazón son más importantes con respecto del primer grado y generalmente es necesario un período de descanso de 3-4 semanas.
Grado III – Rotura completa del ligamento. Los pacientes presentan hinchazón y dolor importante. A menudo tienen dificultad al doblar la rodilla. Inestabilidad y hundimientos son una característica común en la rotura del ligamento lateral interno. Generalmente, una rodillera o una férula son necesarias para proteger la articulación y la curación necesita de al menos 6 semanas.
Diagnóstico de la lesión del ligamento colateral de la rodilla
Primero se realizará una competa anamnesis al paciente a cerca de cómo se produjo la lesión. Seguido, la observación de la rodilla por si se viera inflamación y/o hematoma. A continuación palpación del LCM y de los tejidos y estructuras adyacentes. Por último el test ortópedico clásico es provocar un valgo forzado de la rodilla. Según lo observado en estas fases se puede intuir si verdaderamente hay una lesión del LLI, qué grado de lesión tiene el paciente y qué tratamiento será el idóneo.
Puede ser necesario una resonancia magnética (RMN) para proveer de detalles en caso de laceración parcial. La RMN visualiza bien la anatomía de los tejidos blandos y es indicada si se sospecha una lesión de menisco o de los ligamentos cruzados. Es útil para localizar un edema óseo o una fractura osteo-condral y para identificar el punto de la lesión del colateral medial.
Tratamiento del ligamento lateral interno de la rodilla
Las primeras 24-48h hace falta seguir el protocolo RICE con des-canso, hielo, compresión y elevación. Carga parcial de la pierna y puede hacer falta usar las muletas hasta que se deje de cojear o si hay dolor en carga. El ligamento colateral medial tiene un buen aporte de sangre y generalmente contesta bien al tratamiento no quirúrgico. Si la lesión no es grave, puede ser suficiente con el descanso, la inmovilización de la rodilla, y la fisioterapia; que empezaría con tratamientos analgésicos, antiinflamatorios y pro-regenerativos (como la cámara hiperbárica que ya está usando Cristiano Ronaldo para acelerar el proceso de curación).
Las primeras 72 h se pude recomendar una rodillera o un vendaje funcional que permita a la rodilla doblarse y extenderse pero que limite el movimiento lateral. Con base en la mejoría del dolor y la hinchazón, se puede iniciar un programa rehabilitación en pocos días.
El objetivo en esta fase sería recuperar la normal amplitud de movimiento de la rodilla y lograr iniciar los ejercicios activos para restablecer la fuerza insistiendo sobre todo en el vasto interno del cuádriceps, junto con ejercicios progresivos de propiocepción.
Acabada esta fase se procede a la integración del deportista a su deporte con una adecuada y pautada readaptación progresiva.
Generalmente, los deportistas con lesiones de primero y segundo grado vuelven a jugar dentro de 2-3 semanas. Quien padece una rotura completa del ligamento necesita 6 o más semanas antes de volver a jugar.
Si tienes síntomas similares o has sufrido un golpe o caída que haya podido provocar esta lesión no dudes en contactar con nosotros para poder ayudarte. O si lo prefieres te atenderemos de forma presencial en la Calle Mayor 17 en Burlada, muy cerca de Pamplona.
